No hablo ni de la de Sinamaica, ni la de las Peonías.... hablo de las lagunas que se forman en esta ciudad después de un torrencial aguacero, donde el carburador, o distribuidor del carro, puede salir afectado.....
Después de una buena rumba, con exceso de alcohol en las venas, un amanecer cercano, y una que otra laguna (no de agua, sino mental) aqui voy a relatar, las cosas que sucedieron de sábado 25 para domingo 26 (ya sé que es muy tarde, pero igual quería compartir esta experiencia), encerrado en un carro, quedado por el desbordamiento de agua en las calles....
- Me dieron ganas de orinar, no me aguante, abri la puerta del carro, antes que hiciera algo paso otro carro y me mojo (eeeeeewwwwwwwwwwww).
- Lo intenté de nuevo, pero esta vez con exito (y sin carros cerca que me pudieran ver)
- Me dormi
- Me levantaron y que para empujar el carro (suerte, el licor nos tenia incoherentes) pero igual, me quite los zapatos, me recogi el jean, abri la puerta, me volvieron a mojar, y al final, me quede dentro del carro....
- daniel me gritaba en el oido (nunca escuché)
- Seguí durmiendo, pero según pao, de una manera extraordinaria (sobre mi propia panza)
- Ronqueeeeeeeeeeeeeeeeee, Ronqueeeeeeeeeeeeeeeeeee (típicos ronquidos del borracho)
- de pronto abri los ojos, vi a pao pegada al vidrio de mi puerta, quitando lo empañado, y dandole golpes y llamando a alguien.... eran unos salserines que nos empujaron una larga distancia, según me cuentan los sobrios del carro.
- nos dormimos todos dentro del carro....
- Pao recibio llamada de su mama (nos quedamos un poco antes de las 6, y ya eran pasadas las 8)
- Pao se inspiro y escribio en su diario, con grandes dotes en letras y composición